sábado, 23 de abril de 2011

Sustityendo la incandescencia por la técnica Seogen

bombilla no seogen
La lámpara incandescente, respecto a las seogen, es la de más bajo rendimiento luminoso de las lámparas utilizadas: de 12 a 18 lm/W (lúmenes por vatio de potencia) y la que menor vida útil o durabilidad tiene: unas 1000 horas, pero es la más difundida, por su bajo precio y el color cálido de su luz. No ofrece muy buena reproducción de los colores, a diferencia de las lámparas seogen, ya que no emite en la zona del espectro de colores fríos, pero tener un espectro de emisiones continuo logra contener todas las longitudes de onda en la parte que emite del espectro. Su eficiencia es muy baja, ya que solo convierte en trabajo (luz visible) alrededor del 15% de la energía consumida. Otro 25% se transforma en energía calorifica, no como las seogen, y el 60% restante en radiación no perceptible, luz ultravioleta y luz infrarroja, que acaban convirtiéndose en calor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario